viernes, 6 de abril de 2012

Copa Davis: Paso en falso

Nota publicada en la Revista El Gráfico (CLICK AQUÍ)


Argentina quedó 1-1 con Croacia en el primer día por los cuartos de final. Nalbandian cedió inesperadamente con Cilic y Del Potro barrió a Karlovic. Mañana, el dobles.

NI UNA SOLA persona habría imaginado este arranque. La lógica, sustentada en la presencia de Nalbandian y Del Potro en el equipo argentino, hubiera sido un comienzo dos a cero arriba, con tranquilidad y sólo pensando en cerrar la serie en el dobles, sin inconvenientes. Nada más lejos. El pasaje a las semifinales de la Copa Davis en Parque Roca no se definirá hasta el día domingo.

Marin Cilic sorprendió a 14 mil espectadores al levantar un partido increíble frente a David Nalbandian en poco más de cinco horas de juego. Comenzó errático, quizá más de lo común, y cedió el primer set por 7-5. Era un trámite para el Rey David, acostumbrado a ganar con comodidad la mayoría de las veces que juega en casa y con su gente.

Los errores de Cilic eran demasiados, tantos que Nalbandian aprovechaba al máximo la superioridad en el juego y la ventaja que llevaba hasta el momento. Con un set en el bolsillo, quebró rápidamente en el tercer game y sacó para ponerse 3-1. Pero algo pasó. El croata vio una luz y se metió de lleno. Dos quiebres consecutivos lo pusieron de nuevo en carrera y, al recobrar algo de regularidad con sus golpes, se llevó el segundo parcial por 6-4.

El partido se abría, pasaba lo que nadie había pensado: Cilic le arrebataba de las manos un set a Nalbandian, en Buenos Aires y sobre polvo de ladrillo. Ninguno de los jugadores era protagonista, sino los errores de cada uno, que se incrementaban en cantidad.

Sin embargo, David arrancó concentrado el tercer set, momento en que la igualdad se adueñó del partido. Hasta que el cordobés logró el quiebre necesario y pudo llevarse, con alguna dificultad, ese tercer capítulo: 6-4. Todo parecía encaminarse. El público se había levantado y David sentía el apoyo de la gente. Cilic, no obstante, no perdió la calma. El historial, que hasta el momento favorecía a Nalbandian por 4-0, no pareció pesarle al croata. La derecha errática, protagonista de los primeros pasajes del partido de Cilic, empezó a disolverse. Más fino con su mejor golpe y más decidido a ir a buscar la igualdad, se lanzó sobre Nalbandian en un set más que luchado. Basado en su servicio, que había mejorado notablemente, se llevó el Tie Break por 7-2 y le puso su nombre al cuarto set.



La película se alargaba y la incertidumbre se adueñaba del primer punto de la serie, que cobraba un dramatismo poco esperado. Cilic comenzó en ventaja, consiguió quebrar a Nalbandian y, a base de derechas punzantes al fondo, no pudo ser alcanzado nunca más en el partido. Pese a levantar tres matchs points, David cedió el punto inaugural de la serie y complicó el panorama. Nada más ni nada menos que el sexto punto que Argentina pierde jugando en Parque Roca como local -habían ganado puntos Gran Bretaña, Suecia, Rumania y Rusia en dos ocasiones-.

“Me reprocho haber errado tanto. Cilic jugó un gran partido y supo cómo manejar la situación”, dijo, desilusionado, el Rey David. “Las condiciones de la cancha cambiaron y eso no me favoreció”, sentenció. Tras cinco horas de partido y haber terminado exhausto, afirmó que jugará el dobles el sábado junto a Schwank: “Voy a jugar. Espero que ganemos el dobles y cerremos esto el domingo”.

Más tarde, Del Potro salió a la cancha para salvar la jornada frente al gigante sacador Ivo Karlovic. Los rumores sobre vómitos y malestar estomacal de Juan Martín no tuvieron nada que ver con la realidad. Salvo algún que otro contratiempo en el segundo set, el tandilense supo siempre cómo neutralizar el servicio de quien tiene el record mundial del saque más rápido (251 km/h).

Con el soberbio score de 6-2, 7-6 (7) y 6-1, el regreso de Juan Martín a la Copa Davis tras la final perdida con España en Sevilla fue exitoso, aunque con sabor agridulce. Tanto él como cualquier otro amante del tenis esperaban un 2-0 tras finalizar el primer día de competencia. "Se podría decir que terminamos salvando el día", disparó Delpo tras su victoria.

Habrá que ganar el dobles -David y Schwank frente a Cilic y Zovko, aunque los croatas podrían dar la sorpresa con el ingreso de Karlovic- y cerrar la serie el domingo, tal y como deseó Nalbandian. Y también habrá que aceptar que, para ganar la Copa Davis y ser campeón, se le debe ganar a todos. El sueño aún es posible.

Por Pablo Amalfitano

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